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ESPECIES: Cuando empezamos a ganar altura en los ríos del pirineo Aragonés, es de adivinar que la trucha va ha ser la única residente de las claras y puras aguas que discurren por estos lugares.



En el Tramo libre sin muerte del Cinqueta, nos encontramos con unas dignas adversarias, a las que bautizamos como "las escapistas". En cuanto una pintona quedaba prendida de nuestro sedal, emprendían una enérgica huida en la que ayudada por la sucesión de saltos conseguian deshacerse del anzuelo en numerosas ocasiones.

Al contrario del nuestra anterior jornada de pesca en el Coto sin muerte de Bielsa donde  efémeras y emergentes hicieron que pasaramos un día memorable, en el cinqueta no obtuvimos muchas capturas con estas imitaciones. Quizás no supimos encontrar la correcta.



Sin embargo, los destellos y vibraciones de una cucharilla llevada lentamente por la corriente hicieron que disfrutáramos nuevamente de la magia de los ríos de Huesca.

El canto de los pájaros adornando el rumor del río. Frias, puras y cristalinas aguas en un precioso paraje con abundancia de truchas. ¡ Estamos deseando volver!

Nos sorprendieron los numerosos saltos con los que nos deleitaron las truchas de Cinqueta.

El pirineo en todo su esplendor. 

Debemos recordar, que la cucharilla y el pez artificial, estan autorizados desde 2012 en los tramos de captura y suelta, siempre que este provista de un anzuelo simple y sin muerte o arponcillo. Aunque el la normativa hay excepciones como el río Piedra. Por lo que recomendamos leerla por completo, antes de dirigirnos hacía cualquier zona de pesca.

Aun siendo unos auténticos entusiastas del pez artificial, en este río no hicimos uso de él, los buenos resultados que nos estaba dando la cucharilla y un río de corrientes con escasa profundidad nos animaron a continuar con las giratorias.



DESCRIPCIÓN​: En este tramo del Cinqueta nos encontraremos con un río muy salvaje con mucha vegetación en ambas orillas y donde en ocasiones es difícil de atravesar. 



El río solventa un considerable desnivel por lo que predominaran las zonas de corriente. Encontraremos varias badinas, y algunas tablas, aunque estas últimas no serán tan numerosas como les gustaría a los mosqueros.



Pocos serán los accesos cómodos y dependiendo del tramo que pesquemos, el retorno al nuestro vehículo lo deberemos hacer por el río siendo muy dificil o imposible en algunos casos el poder acceder a la carretera. 







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